Un espacio destinado a fomentar la investigación, la valoración, el conocimiento y la difusión de la cultura e historia de la milenaria Nación Guaraní y de los Pueblos Originarios.

Nuestras culturas originarias guardan una gran sabiduría. Ellos saben del vivir en armonía con la naturaleza y han aprendido a conocer sus secretos y utilizarlos en beneficio de todos. Algunos los ven como si fueran pasado sin comprender que sin ellos es imposible el futuro.

domingo, 15 de mayo de 2011

Los Guaraníes y la Revolución de Mayo


El 8 de Julio de 1.810 fue un día histórico para el suelo misionero. Ese día en el Cabildo de Candelaria se reconoció al gobierno criollo elegido el 25 de Mayo en Buenos Aires. Asistieron caciques de los ocho pueblos. “No es un hecho casual; los misioneros eran pueblo originario” según la expresión del historiador Alejandro Larguía.

Los sucesos que se celebran
Apenas había transcurrido un mes y medio de la sesión del Cabildo en Buenos Aires del 25 de mayo - que inauguraba la instancia de liberación de la corona española - cuando Misiones unía sus votos a la Primera Junta que presidía Cornelio Saavedra.
Se reunieron en la sala capitular del Cabildo de Candelaria los caciques principales de Santa Ana, Loreto, San Ignacio, Corpus, Jesús, Trinidad e Itapúa, junto con otros vecinos y autoridades, todos citados por bando del 25 de junio.
El subdelegado leyó en voz alta la copia del oficio de la Junta de la Capital inserta en el oficio del gobernador interino de entonces, Tomás de Rocamora.
Una vez conocida por los que entendían el castellano, la copia fue leída en guaraní por el intérprete Antonio Morales.
Finalizada esa doble lectura, el vecindario congregado reconoció la autoridad de la Primera Junta.
Se celebró inmediatamente una misa de gracias en la Iglesia Parroquial a cargo del vicario Jacinto Núñez y el Tedéum. 

Contexto post-mayo
Pese a que se había constituido la Primera Junta de Gobierno, estaba claro que los españoles no iban a darse fácilmente por vencidos frente a aquel grupo de insurrectos; el propio ex-virrey Cisneros intentó lograr apoyo de Montevideo, pero terminó arrestado y enviado a España.
El haber derrocado al virrey y a la junta que en principio se había formado para representarlo, reemplazándolos por la Primera Junta fue sin embargo un acontecimiento escandaloso para muchos, y por lo tanto las primeras reacciones en el virreinato ante lo sucedido no fueron las mejores. En Córdoba se armó una contrarrevolución, presidida por Liniers; Mendoza tuvo algunas reticencias en aceptar a la nueva Junta; en Salta hubo muchas discusiones; y la resistencia fue activa en el Alto Perú, Paraguay y Montevideo.
La Argentina era muy distinta a lo que hoy es y los principales centros estaban ubicados como se ve, en Córdoba, Paraguay y el Alto Perú.
Una de las primeras medidas de la Junta fue anoticiar de los sucesos e invitar a todas las provincias a participar del primer gobierno propio, y para lograr apoyos envió a Juan José Castelli al Alto Perú y a Manuel Belgrano al Paraguay.
En Córdoba, Santiago de Liniers (ex virrey y héroe de la resistencia frente a los ingleses) se levantó contra el poder de la Junta, pero la rebelión fue sofocada por las fuerzas patriotas al mando de Francisco Ortiz de Ocampo. Juan José Castelli se encargaría de llevar a cabo su fusilamiento.
Mientras que en su trayecto al Paraguay, Belgrano tuvo algunas victorias iniciales, pero fue derrotado en Paraguarí y Tacuarí. En consecuencia, los paraguayos formaron un gobierno propio en Asunción y el Paraguay dejó de formar parte definitivamente de las Provincias Unidas del Río de la Plata.
Por su parte, Castelli triunfó en las batallas de Suipacha (que según algunos historiadores, no duró más de 30 minutos) y Cotagaita, dando comienzo a la Guerra de la Independencia, que allanaría el camino hacia la declaración de nuestra Independencia el 9 de julio de 1816.


“El ser americano”, por Larguía
El historiador misionero Alejandro Larguía fundamenta la actitud, primera entre todas, de los cabildantes misioneros:
“Advertimos en 1810 una confrontación claramente definida entre los españoles americanos y los europeos la cual refleja el espíritu de revancha contra estos por parte de los principales dirigentes revolucionarios como fueron Castelli, French, Moreno desde que tuvieron el poder de la fuerza armada.
“Esto viene a cuento de los sucesos de 1810 en Misiones, provincia que junto a la del Paraguay gobernaba el General español peninsular Bernardo de Velasco.
“Este rechazó el pronunciamiento de la Junta que había depuesto al Virrey Cisneros. Diferente fue la actitud de su subordinado el Coronel americano Tomás de Rocamora, que desde la sede del Departamento de Yapeyú adhirió a la autoridad de la Junta siendo designado gobernador propietario de la provincia de Misiones. O al menos de la parte de esta que excluyendo del departamento de Santiago quedaba en su jurisdicción.
“Rocamora remitió oficios a Candelaria para que los cabildos se reunieran a considerar la cuestión del pronunciamiento de la Junta.
“La reunión se verificó el día 8 de julio y todos los representantes, capitulares de los ocho pueblos del departamento de Candelaria aprobaron la adhesión al pronunciamiento después de serles leído en guaraní que era su lengua.
“La primer provincia que adhirió al proceso independentista iniciado en Mayo de 1810 fue la de Misiones. Y lo hizo en asamblea convocada al efecto en la que libremente los representantes se manifestaron. Y no por casualidad sino por causalidad todos ellos eran americanos. Del tipo más genuino posible de la americanidad, eran pueblo originario, prácticamente sin mezclas todavía con otras sangres con las que hoy, dos siglos después están amalgamados.”

Los firmantes del acta histórica
Francisco Martínez de Lobato, José Jacinto Núñez, Manuel Hidalgo, Bartolomé Coronil, Rafael Díaz de los Ríos, Luis Chivé, Francisco Cambiró, José Pancia, Fuctuoso Bera Potí, Benedicto Yué, Valeriano Mbacay, Cristano Chiyú, Mariano Arendá, Francisco Taberacuá, Ignacio Abañerú, Fulgencio Yaparí, Pedro Yarupá, Gregori Cariyú, Juan Ángel Yrarobí, Fabián Arauarí, José Ñandubay, José Añegará, Eusebio Guirapepó, Antonio Morales, Domingo Pereyra.

Fuente: Diario “El Territorio” – Posadas del 8 de Julio de 2.010



4 comentarios:

  1. Gracias, Javier, una vez más por regalarnos pedazos de historia tan nuestra que nadie, por mucho tiempo, se dignó a darnos. Muy bueno esto.
    Hugo López

    ResponderEliminar
  2. Gracias Hugo...Vamos "descubriendo" la historia en la que nuestros hermanos han sido partícipes...La historia misionera está escrita con presencia guaraní como fundamental protagonista.
    Un gran abrazo!
    Javier

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias por la información, la comparto amigo!

    ResponderEliminar
  4. La independencia de los pueblos originarios, la republica de entre rios, la banda oriental, cordoba, santa fe fue en junio de 1915. la independencia de 1816 no fue firmada por la mayoria del pueblo

    ResponderEliminar